top of page

Parashat Ree-2  Adaptado por FFdez de Rav Iehuda Levi

Temas de la Parashá

Devarim (Deuteronomio) 11:26 - 16:17

Nuestra parashá habla sobre los siguientes temas:

Primera aliá (11:26 - 12:10): Moshé Rabenu le explica al pueblo que delante de ellos tienen el camino de la bendición o de la maldición.  Son recordadas las mitzvot de destruir todos los lugares donde se practicaba la idolatría, de  ofrecer los korbanot (sacrificios) sólo en el lugar que Dios elegirá y la prohibición de tener altares privados.

Segunda aliá (12:11 - 28): Dios escogerá el lugar donde se ofrecerán los sacrificios.  Leyes referentes a la consumición de carne.

Tercer aliá (12:29 - 13:19): Moshé les advierte que no se desvíen en pos de la idolatría, y que no agreguen mitzvot a la Torá y tampoco disminuyan de ellas.  Es recordada la prohibición de escuchar a falsos profetas o familiares o seres queridos que intenten desviarnos del camino de Dios.  La obligación de destruir a la ciudad que se haya pervertido totalmente detrás de la idolatría.

Cuarta aliá (14:1 - 21): No podemos hacer determinadas acciones como señal de luto por la muerte de un ser querido.  Los animales que está permitido comer.  Los pescados permitidos para el consumo.  Las aves permitidas para el consumo.

Quinta aliá (14:22 - 29): Las leyes de los diezmos.  Las leyes de la shemitá (año sabático de la tierra).

Sexta aliá (15:1 - 18): Leyes relacionadas con los esclavos y la caducación de deudas.  Leyes de la tzedaká (caridad) y del préstamo de dinero sin interés.  

Séptima aliá (15:19 - 16:17): Algunas leyes sobre los primogénitos de los animales.  Moshé le recuerda al pueblo que cuide las fiestas de Pésaj, Shavuot y Sucot, incluyendo todas las mitzvot relacionadas con ellas.

 

Comentario de la Parashá

Esta es una parte fundamental de la fe Hebrea actual:

Creer en las palabras de los Sabios y en la Torá Oral o tradición que Dios le enseñó a Moshé Rabenu en el monte Sinaí y que fue transmitiéndose en forma oral de maestro a alumno de generación en generación - hasta que fue compilada en los distintos libros (la Mishná, el Talmud, la Tosaftá, la Baraitá, los distintos Midrashim, etc.), pues sin sus enseñanzas no podríamos entender muchas partes de la Torá escrita (Al nivel de entendimiento Semita digo yo).

 

Por citar un ejemplos: la mitzvá (Mandamiento) de los tefilín, llamados en español 'filacterias', y que son unas cajitas cuadradas de cuero, pintadas de negro, que en su interior contienen varios pasajes de la Torá escritos sobre pergamino, y que se ajustan a la cabeza y al brazo mediante tiras que también son de cuero pintado de negro.  

Esta mitzvá figura cuatro veces en toda la Torá (Parte de la Biblia, pentateuco) - dos veces en el libro de Éxodo (Shemot) y dos en Deuteronomio (Devarim)- y estos son los versículos:

"Y será para ti una señal sobre tu mano y un recordatorio entre tus ojos, para que esté la Torá de DIOS en tu boca, pues con mano fuerte te ha sacado D'os de Egipto" (Shemot - Éxodo- 13:9).

"Y será una señal sobre tu mano, y totafot entre tus ojos, pues con mano fuerte nos ha sacado D'os de Egipto" (Shemot 13:16).

"Y estarán estas palabras que Yo te ordeno hoy en tu corazón… y las atarás - como señal - a tu mano, y serán como totafot entre tus ojos" (Devarim -Deuteronomio- 6:6 y 8).

"Y ustedes pondrán estas palabras Mías, en su corazón y en su alma, y las atarán - como señal - a vuestras manos, y serán como totafot entre vuestros ojos" (Devarim 11:18).

Sin la interpretación de los sabios y la tradición oral sería imposible entender (según el pensamiento actual hebreo) que es "una señal sobre tu mano", o "un recordatorio entre tus ojos", o para comprender lo qué significa la palabra "totafot".

Pero primero debemos estudiar dónde es deben ser colocados los tefilín, pues aparentemente hay contradicción entre la Torá Escrita y la transmisión oral de los sabios.

 

Literalmente la palabra dice que debe ser colocado sobre la mano y el otro entre los ojos, pero los sabios en el Talmud dicen que “entre tus ojos” se refiere en la parte alta de la cabeza porque está escrito en otro lugar de la Torá (Pentateuco): '…ni se rasuren entre vuestros ojos…' (Devarim, Deuteronomio 14:1) y allí se habla de la parte alta de la cabeza, al lugar donde se puede rasurar, porque entre los ojos no hay cabello para rasurar (En algunas personas sí, hoy hasta los hombres se sacan las cejas y los pelos de entres los ojos, el extremo de esto son los metrosexuales).

 

 Cuando algo no está suficientemente aclarado en la Torá (Pentateuco), ¿cómo pueden los judíos creyentes en la Torá - cumplir las palabras del Talmud (Tradición oral), abandonando lo que está escrito claramente en la Torá?  Además  ¿esta contradicción no demostraría que las palabras del Talmud y toda la tradición oral son de dudosa credibilidad?    

 

¿Debemos creer ciegamente en las palabras de la tradición oral?

Lo que no podemos negar es que los sabios conocían profundamente las escrituras y su idioma: El "lashón hakódesh" (la lengua sagrada) - idioma muy diferente del hebreo moderno, en su significado y uso.  Y que se apoyaban en una tradición de sabios que se dedicaban con esfuerzo y devoción a la trasmisión e interpretación  de la palabra a través de los siglos.

 

De todos modos lo importante es el porqué:  

"Ustedes son hijos de Dios; no se rasguen ni se rasuren entre vuestros ojos, por un muerto" (Devarim -Deuteronomio- 14:1).   Y es que como somos hijos de Dios no debemos hacer nada en nuestros cuerpos como objetivo de un ritual por un muerto.

En el cometario dice: En el judaísmo todos los integrantes del pueblo de Israel son llamados "los hijos de Dios", a diferencia de otras religiones que consideran que sólo uno fue el hijo de Dios, además de que fue matado.  (Esto no es verdad, es un comentario sin fundamento e irrespetuoso, solo por solo citar unos versículo  del Pacto renovado Juan 1:12  Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios/ Rom 8:14  Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios.) Solo que el Mesías es el primogénito.

También la prohibición de dos costumbres de duelo y dolor por la desaparición de algún ser querido, de aquellas épocas.

La primera costumbre consistía en que quien el doliente, se rasgaba la piel de su cuerpo, demostrando así su dolor, y la segunda era que también rasuraban la parte que estaba por encima de la frente, más la Torá prohibió totalmente estas costumbres paganas.

 

(Pero esto, aunque es muy importante, es solo sombra de un principio poderoso que debemos conocer y practicar. La Palabra debe ser la marca en nuestro actuar (mano derecha) y nuestro pensar (entre tus ojos) Un hombre que piensa constantemente en El Eterno Dios y su Palabra, y actúa según ella, es como si estuviera marcado, como si tuviera el cello de Dios. Donde camine o se pare, todos van a reconocer que ese es un barón de Dios.

Muchos creyentes en Jesús como el Cristo o Mesías (Yashúa Ha Mashía) especula sobre las palabras del Pacto Renovado o Nuevo Testamento, se dice que la marca de la bestia será un micro chip o algo por el estilo. De lo cual no tengo duda que pudiera llegar a ser. Pero igual esto es solo sombra de algo más profundo. Un hombre marcado en la mano o la frente por la bestia, es un hombre que actúa y piensa según la bestia (Roma) Es un hombre que no piensa y actúa según la palabra en su verdadero contexto  y sus raíces, estará regido por la forma de pensar y actuar que le enseñó la gran ramera, en el exilio de Roma, por eso todos lo conocerán, pues estará marcado o sellado por la bestia que sostiene a la gran ramera.

 

Apo 13:15  Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase.

Apo 13:16  Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente;

Apo 13:17  y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre.

Apo 13:18  Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos sesenta y seis.

 

© 2015 por Fernando Fernández. Creado con Wix.com

bottom of page